"El Señor de los Milagros
Uniendo a todos los emigrantes peruanos en una sola familia humana"
El mes de octubre en nuestro país es de suma trascendencia en relación a
la espiritualidad y, de forma muy especial, es significativo para los más de dos millones de
peruanos y peruanas que se encuentran fuera de nuestra patria. Desde la
Conferencia Episcopal Peruana, a través del Departamento Pastoral de Movilidad
Humana, queremos reflexionar y mirar junto a ustedes al Señor de los Milagros: "...contemplarán
al que traspasaron" (Jn 19,37).
El hecho de que el Señor de los Milagros haya sido designado por los
Obispos del Perú como Patrono de los Migrantes Peruanos, en la Asamblea
de Obispos de Enero de 2005, nos reafirma el amor y la entrega generosa de
nuestro Señor Jesucristo a su Pueblo, remarcado en el Documento de Aparecida,
por eso "...La Iglesia como Madre, debe sentirse a sí misma como
Iglesia sin fronteras, Iglesia familiar, atenta al fenómeno de la movilidad
humana..." (DA. Nº 412), poniendo especial cuidado de sus
hijos e hijas que, por diversas circunstancias, dejaron su patria y familia en
busca de una mejor calidad de vida.
El Santo Padre, el Papa Benedicto XVI, en su Mensaje por la 97 Jornada
Mundial del Emigrante y Refugiado, colocaba como tema "Una sola familia
humana", recordándonos que esta Jornada: "...brinda a toda la
Iglesia la oportunidad de reflexionar... de orar para que los corazones se
abran a la acogida cristiana y de trabajar para que crezcan en el mundo la
justicia y la caridad...". Iluminados
por estas palabras, afirmamos que el Señor de los Milagros es un claro signo de
esta llamada. la formar una sola familia humana en Cristo, ya que al haberse
expandido esta especial devoción en todos los países donde han emigrado, esta
venerada imagen se convierte en un punto de unidad y encuentro fraterno entre
los peruanos, la Iglesia de acogida y otras colectividades de emigrantes.
Reconocemos, como señala el Documento de Aparecida que: "los
migrantes que parten de nuestras comunidades pueden ofrecer un valioso aporte
misionero a las comunidades que los acogen" (DA. Nº 415)
Les animamos a continuar ofreciendo este "aporte misionero", que
mantengan su fe católica y continúen difundiendo la espiritualidad del Señor de
los Milagros por todo el mundo.
Reiteramos nuestro compromiso de continuar unidos en la oración con cada
uno de ustedes, les recordamos el especial afecto de su Iglesia peruana. Que el
Señor de los Milagros derrame abundantes bendiciones en cada hogar, en cada
proyecto, sueño y esperanza.
En Cristo.
Mons. Héctor Miguel Cabrejos Vidarte
Arzobispo de Trujillo
Presidente de la Conferencia
Episcopal Peruana
Mons. Daniel Thomas Turley Murphy
Obispo de Chulucanas
Pdte. Departamento de Pastoral de la Movilidad Humana
de la CEP